Aspectos que nos debilitan
Aboru aburos!
Mis mejores deseos para quienes puedan leer estas líneas.
Hoy hablamos de la importancia de comunicarnos.
Desde el escrito anterior, se conjugaron días de intenso trabajo y algunos asuntos médicos pendientes e impostergables que me impidieron, hasta hoy, poder continuar con esta labor de actualización y divulgación de nuestro IfáOrisa, aunque no dejé de pensar en ello.
La lectura de diversos escritos sobre las prácticas religiosas en la llamada Africa Negra y su continuidad en condiciones esclavitud; junto a la visión de documentales actuales sobre la situación general que allí se vive, han fortalecido mi convicción inicial de que los propios africanos impedían o disuadían a sus descendientes de continuar las prácticas, por considerarse abandonados a su suerte por sus Deidades.
Veamos:
África negra es fuente de grandes riquezas mineras como el petróleo, cobre, oro, estaño, cobalto, cromo, uranio, coltán y diamantes. Asimismo tiene un enorme potencial energético, solar, eólico, fluvial y de biocombustibles. Sin embargo en la actualidad África negra es considerada generalmente como la región más empobrecida artificialmente del planeta, sufriendo los graves legados del colonialismo, el neocolonialismo, los conflictos étnicos e inestabilidad política. En ésta región se ubican los países del planeta con menor índice de desarrollo humano.
En Uganda coinciden hoy, por necesidades económicas, muchísimas etnias de todo el continente, con sus lenguas y crencias propias. Parte de ellas llegaron desde Nigeria. La comunicación entre ellas es, como minimo, en el idioma oficial, que no llega a detalles intimos, como los rezos y rituales.
Un hermano muy cercano, que visitó Guinea hace unos años, me dijo que en ese pequeño país existen 121 dialectos, de modo que los gobernantes, para comunicarse en los distintos pueblos, van acompañados de personal que le informa de la lengua usada en cada lugar, para que les hable al menos en una que puedan entender medianamente.
El aspecto educativo de buena parte del continente africano sigue a cargo de misionera(o)s católicos, que realizan una admirable labor porque luchan cada día por alfabetizar y enseñar, como herramientas para sacar a esos pueblos del atraso ancestral que padecen, pero esa labor se basa en la fe a un dios ajeno al de los nativos y que ha provocado la pérdida casi total de sus creencias autóctonas.
Con este panorama, los seguidores de IfáOrisa tenemos la obligada necesidad de actualizar nuestra práctica, porque de no hacerlo así, desaparecerá, pues seremos un eslabón obsoleto de una creencia religiosa perteneciente a la zona más atrasada del planeta, que buscó amparo en la creencia de sus amos, pero que luego fue incapaz de restaurar sus valores originales, en un mundo donde las religiones beligerantes y poderosas son las que consiguen millones de seguidores.
Hay que rescatar y unir todos los conocimientos que podamos, unificar lo que rezamos y decimos. Actualizar los conceptos y consejos que se brindan a quienes consultan nuestros oráculos, pero sobretodo, comunicarnos entre nosotros, divulgar lo que sabemos y pensamos, despojarnos de la desunión provocada por los distintos dialectos.
En fin, abrazar lo que nos une, que es lo que hará posible que IfáOrisa perdure.
Y hasta aquípor hoy egbón ati aburo.
Seguimos divulgando para aprender.
Mojugba IfáOrisa
Okanbi.